Cuando se dice que Sagitario es el signo más afortunado del zodiaco por algo será. Pero lo que le caracteriza por encima de todas las cosas es que la suerte no le llega como un don divino, sino que la trabaja y la consigue con su carácter, su optimismo, su fuerza y su ímpetu.
Los que nacen bajo el signo de Sagitario siempre logran grandes triunfos, pero es que no hay otro signo que sepa combinar como él ambición, riesgo e inteligencia. De manera que la suerte en su caso no es simple casualidad.
¿Qué hace diferente a un Sagitario?
Sagitario no se está quieto, no espera a que la fortuna llegue, ni atraparla al vuelo. Muy al contrario, planifica el futuro, mira hacia delante, analiza posibilidades y oportunidades para no desaprovechar ninguna de las que se le ponga delante. Lo que otros no ven o no saben atrapar Sagitario si lo hace.
Pero además, no tiene problemas en probar nuevas situaciones o en afrontar nuevos retos. Sagitario adora el riesgo, ponerse aprueba y superar sus propios límites. Por eso no duda en probarlo todo y, cuando comprueba que ese proyecto puede merecer la pena se lanza a él de lleno y con entusiasmo.
Y si puede lanzarse a la piscina cuando otros no llegan ni al borde es porque Sagitario cree profundamente en sí mismo y en sus decisiones. Sagitario es un signo positivo, optimista, su actitud positiva les guía en todos los desafíos y retos que se proponen. Y su carácter abierto no solo le lleva a conseguir todo lo que se propone, sino que contagia a los demás, por lo que las posibilidades de seguir adelante son mucho mayores con el apoyo de quien le rodea. Sagitario es además, tremendamente generoso, de manera que es fácil que cuando más lo necesite haya mucha gente dispuesta a devolverle los favores que hizo tiempo atrás.
Otra de las características que le llevan directamente al éxito, a conseguir lo que se plantea, es que los sagitario son muy independientes. Es decir, se aferran a pocas cosas, de modo que si hay algo que no les convence o en lo que no ven posibilidades, directamente lo descartan, no malgastan energías en proyectos cuando creen que no merecen la pena. Eso sí, enseguida se ponen manos a la obra para encontrar una alternativa mucho mejor que la que acaban de abandonar.
Son por tanto los sagitario los más afortunados, pero también los que más trabajan para serlo, los que más arriesgan porque siempre piensan que cualquier proyecto que pongan en marcha a va a salir bien. Sagitario tiene suerte, pero se la labra él mismo día a día con su esfuerzo y su optimismo.
